Espejos: ¿cómo colocarlos correctamente?

¿Cómo acomodarlos? El espejo retrovisor central te debe ofrecer el mayor campo visual trasero posible. Podés comprobar su correcta ubicación cuando al mirar para atrás no tenés que realizar ningún movimiento de la cabeza forzado, sino que sólo te alcanza con mover los ojos. Mientras que los espejos laterales los debés colocar lo más abierto posible sin perder la referencia de tu auto, para ganar amplitud visual hacia atrás y, de esta manera, disminuir el ángulo ciego. En síntesis, colócalos justo en el límite en el que la carrocería deja de verse. Y un tema importante es que tengas identificados los puntos ciegos de tu auto, que dependen de su diseño y tamaño.

¿Cómo comprobar si los ajustaste bien? Cuando un auto se aproxima por detrás lo deberías ver primero por el espejo interior, y cuando cambie de carril, irá desapareciendo de este retrovisor para aparecer en el exterior. La clave está en que esta transición debe hacerse sin retrasos ni saltos, es decir, no deberías perder de vista en ningún momento la imagen de ese vehículo.

¿Qué es un punto ciego? Los puntos ciegos se producen porque la forma del auto genera obstáculos que te impiden ver todo lo que lo rodea. Existen puntos provocados por los pilares A (marco del parabrisas delantero) y también por los pilares del parabrisas trasero. Seguro que te pasó de no ver a una moto que circulaba al costado. Ese es el gran peligro que debemos evitar, ya que estos puntos impiden advertir la presencia de otros vehículos, especialmente en el cambio de carril. Por eso tenés hay que tener mucha precaución al realizar ese tipo de maniobras.

Fijate que en la parte delantera tenés menos visibilidad en el lado izquierdo del parabrisas, y esto se debe a que el parante o pilar de ese costado está más próximo. Mientras que en las camionetas muy grandes, el capó es un punto ciego importante.