Alergia al volante: tips para conducir seguras

Durante la esta época se ponen en suspensión distintas partículas, como por ejemplo el polen,  por eso las alérgicas deben estar atentas. Además, se incrementan las infecciones respiratorias. Varios estudios alertan de que el riesgo de sufrir un siniestro al volante aumenta en un 30% en los conductores alérgicos. Para tener una idea, circulando a 90 km/h, un estornudo implica dejar de prestar atención al camino durante más de 125 metros. Y si vas a 100 km/h y estornudás varias veces (algo habitual en una alergia) podés llegar a recorrer más de 140 metros. Y esto se puede agrabar si te lagrimean los ojos.

Pero todo esto lo podemos mitigar si tenemos en cuenta algunas recomendaciones, tanto para las que conducen un auto, una moto, o se sumaron a la micromovilidad y salen con su bici o monopatín.

• Evitá circular la primera hora de la mañana y a última de la tarde, ya que la concentración de polen es más alta a esas horas. Y tené en cuenta que en los días más cálidos y secos suele haber más polen.
• No te toques la cara con las manos ni te frotes los ojos. Ya que eso hará que el polen se extienda. Es mucho mejor usar un pañuelo humedecido.
• Hidratate, el agua ayuda a eliminar la mucosidad.
• Descansá. La reacción alérgica produce cansancio y los tratamientos, muchas veces, somnolencia.

En auto

• Cambia los filtros de aire del auto. Si bien se recomienda hacerlo cada 15.000 kilómetros o al año, si sos alérgica acortá estos periodos. Además, fijate si tu auto tiene filtro antipolen.
• Si tomás medicación y vas a realizar un viaje largo, inicia el tratamiento unos días antes ya que los posibles efectos secundarios se minimizan a medida que el organismo se acostumbra al medicamento.
• Evita abrir las ventanillas para impedir que ingrese el polen.
• Ventilá el auto con la función de recirculación, no con la del aire exterior. Incluso cuando conectes el aire acondicionado.
• Mantené limpio el interior del auto para impedir que se acumule polvo sobre las superficies.

En bici

• Cuando puedas, pedalea a favor del viento. Esto permitirá sortear, en la medida de lo posible, la entrada del mismo por las vías respiratorias.
• Protegete la nariz y la boca. Acá el barbijo se convirtió en un gran aliado que puede impedir el paso del polen a tu boca y nariz.
• Hidratarte los labios, ya que eso reduce la acción inconsciente de humedecerlos con la saliva (que puede hacer que te tragues el polen).
• Usá anteojos de sol. Siempre resultan una eficaz barrera contra el polen. Y si es tarde o está nublado, optá por los transparentes que cumplen la misma función.

En moto

• Lo idea es utilizar un casco integral. Además de proteger contra el polen, es mucho más seguro. Revisá bien que las entradas de aire estén cerradas.