Los fines de semanas, son días especiales para agarrar el auto y salir en familia de paseo…
¡El viajar es un placer! Como decía la canción de nuestra infancia, pero si además le agregamos comer, es doble placer.
Aunque los hombres protestan, por las migas que dejamos, todos terminamos picando algo mientras escuchamos música o algún partido de fútbol.
Pero si no organizamos el “QUE” comer, cuando llegamos del viaje, nos sentimos pesados por todas las galletitas y caramelos que comimos.
Entonces les propongo que preparemos una buena vianda de viaje rica en proteínas, hidratos y variada, pensando en toda la familia y por sobre todo teniendo en cuenta un menú que contemple la cantidad de horas que esos alimentos estarán fuera del frío, seguros a la hora de consumirlos y así el viaje tiene un final felíz!!
Tips M a tener en cuenta:
Hablamos de miedo, hablamos de fobia, hablamos de pánico, hablamos de temor. Todos circ...
Aprender a manejar, no importa la edad.
Hace un tiempo les preguntamos a las que habían aprendido a manejar en academias, cuále...