Compacto, seguro y práctico, este SUV no busca romper esquemas, pero sí seguir siendo una elección sólida. Sin duda mantiene su vigencia en un segmento cada vez más competitivo.
El Nissan Kicks Play presenta una propuesta equilibrada: diseño urbano, buen espacio interior y un andar confiable. No es el modelo más moderno del segmento —de hecho, ya se anunció que en 2025 llegará la nueva generación que convivirá con esta versión—, pero sigue siendo una opción sólida por la solvencia de la marca, la confiabilidad mecánica y un precio competitivo frente a sus rivales. ¿contra quién compite? Chevrolet Tracker, VW T-Cross, Honda HR-V, Peugeot 2008, Renault Duster y Jeep Renegade. Su diferencial está en la relación precio-producto y el respaldo de Nissan, aunque sus rivales más nuevos lo superan en potencia o nivel de modernidad.
Mantiene un estilo sobrio y actual, sin estridencias. Con 4,31 metros de largo, 1,76 de ancho, 1,59 de alto y 2,62 de distancia entre ejes. Puertas adentro es espacioso y funcional. El tablero es simple pero claro, la multimedia con pantalla táctil cumple con conectividad Android Auto y Apple CarPlay, y el espacio en plazas traseras es suficiente para que viajen cómodos dos adultos. El baúl, con 432 litros, lo posiciona entre los más prácticos del segmento.
Es un SUV compacto pensado para moverse con soltura en la ciudad, pero con la versatilidad suficiente para viajes en ruta.
En la mecánica no hay cambios. Mantiene el motor naftero 1.6 L de 120 CV a 6300 rpm. Y la versión que probamos se combina con una caja automática del tipo CVT de 6 velocidades. El gran atributo de este motor es su confiabilidad. No busques reacciones deportivas, el Kicks prioriza el confort de marcha, ofreciendo una buena insonorización y transmitiendo una sensación segura y agradable al volante. Si le querés dar un toque deportivo a su andar, activá la opción Sport (el botón está en la base de la palanca de cambios) que te llevará a la franja “picante” del tacómetro.
La dirección es liviana, lo que lo hace cómodo en maniobras y estacionamientos. El motor responde de manera progresiva, sin sobresaltos, y la caja CVT acompaña con suavidad en el uso diario, aunque no es su fuerte en aceleraciones rápidas. Nos gustó mucho la posición de manejo, alta y ergonómica, que refuerza la sensación SUV.
En síntesis, ofrece un agradable confort de marcha urbano y un confiable y aplomado comportamiento dinámico en ruta. Un mix ideal para disfrutarlo todos los días.
Uno de los puntos fuertes es la incorporación del paquete Nissan Intelligent Mobility, que incluye:
El Nissan Kicks Play es un SUV confiable y rendidor. No es el más tecnológico ni el más nuevo, pero se defiende con solidez, espacio, seguridad y un andar que transmite tranquilidad. Su mayor fortaleza está en la confianza que genera la marca y en su competitividad frente a rivales más recientes.
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