Agarrar bien el volante es fundamental para una conducción segura y eficiente. Te contamos cuál es la posición correcta y te compartimos los principales tips.
Si simulamos que el volante es un reloj, la mano izquierda tiene que estar a la altura del número 9 y la derecha a la altura del número 3. Los especialistas en seguridad vial aseguran que esa es la mejor posición para maniobrar el vehículo.
Son varios los motivos por los cuales siempre recomiendo tomar el volante a las 9:15, nos cuenta Ianina Zanazzi, Piloto e Instructora de manejo deportivo. Y enumera:
– Casi todos los volantes ya vienen con la forma para que vos coloques tus pulgares en esa posición. Incluso los de competición.
– Tomarlo así te permite tener mayor fuerza, control y agarre en el caso de que tengas que resolver una maniobra de emergencia.
– Esa posición te permite un radio de giro mayor. No te limita.
Y desde el Centro de Experimentación y Seguridad Vial (CESVI) agregan: “a partir de la incorporación de los airbags, la posición de las manos en el volante empezó a tener una mayor trascendencia. Más allá de ser un factor importante para controlar el vehículo también juega un rol clave para no sufrir serias lesiones en el caso de un impacto. Por eso también es importante que, en esa posición, los pulgares se ubiquen sobre el aro del volante para evitar una lesión en el caso de que estalle el airbags“.
Además, desde la Federación Internacional del Automóvil (FIA) destacan que al tomar el volantee a las 9:15, atrás quedan a disposición todos los comandos para las luces, parabrisas, etc. Y tener las manos más separadas brinda más precisión en las maniobras, sin necesidad de hacer fuerza. “Tomando el volante así, los brazos están bien en paralelo, te dan más profundidad al girar el volante y permiten tener una mayor firmeza al momento de tomar una curva“, agregan desde el Audi Driving.
Sin duda los referentes de la seguridad automotriz coinciden en que las 9:15 es la posición correcta. Y agregan que al volante nunca hay que sujetarlo con demasiada fuerza, ya que produce agarrotamiento muscular y fatiga. Recordá ir con los brazos relajados. Y si la posición es la correcta, tenés que poder estirar los brazo y posar la muñeca por sobre el aro del volante sin esforzarte.
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